Graves fallas en sistema de inhibición de celulares en cárceles: millonaria inversión sin resultados

Un informe reservado de la Contraloría General de la República (CGR) reveló graves fallas en el sistema de inhibición de señales en las cárceles chilenas, un proyecto que costó más de $5.600 millones de pesos. A pesar de la millonaria inversión, los privados de libertad han encontrado múltiples formas de evadir la tecnología, desde cambiar chips y clonar IMEI hasta conectarse a redes Wi-Fi cercanas, lo que ha permitido la continuidad de las comunicaciones ilícitas dentro de los penales.
Entre las principales deficiencias detectadas, se señala que las antenas de telefonía móvil próximas a los recintos interfieren con el sistema de bloqueo, mejorando la señal incluso para dispositivos que deberían estar inutilizados. Además, los inhibidores en varias cárceles solo cubren redes 2G, una tecnología prácticamente obsoleta, dejando abiertas las conexiones 3G, 4G y 5G.
El informe también cuestiona la gestión de Gendarmería, que siguió emitiendo pagos millonarios a la empresa contratada a pesar de que el sistema no operaba correctamente. En agosto de 2024, se desembolsaron más de $471 millones de pesos, aunque auditorías posteriores evidenciaron que en varias ocasiones el sistema no registró los dispositivos que debía bloquear. La CGR impuso una multa de $27 millones, pero el problema persiste.
Ante estas irregularidades, la Contraloría ha iniciado un sumario para determinar responsabilidades en Gendarmería, mientras que el Ministerio Público evaluará si existen delitos en la administración del contrato. Por ahora, la tecnología que prometía ser la «bestia negra intramural» ha demostrado ser ineficaz frente a la creatividad de los reos.
Las fallas en inhibidores de señal que costaron más de $5 mil millones: reos llaman y tienen internethttps://t.co/a4pgfa30jR
— BioBioChile (@biobio) March 19, 2025